Descripción de la ruta.

El ferrocarril de Langreo fue uno de los primeros en funcionar de toda España y el de mayor complejidad hasta su fecha de inauguración en 1852 debido a la orografía del terreno. Su objetivo inicial era trasladar el carbón de la cuenca minera del Nalón hacia el puerto de Gijón.

La ruta que tiene poco más de 50 kilómetros parte de la estación de FEVE de La Felguera y trata de seguir el trazado de la vía férrea. Su trazado es sinuoso destacando tres subidas importantes aunque no muy largas, Carbayín Altu, Valdesoto y Varé. Se pasa por la mayoría de las estaciones del trayecto por lo que cabe la posibilidad de acortar la ruta antes de su finalización.

Saliendo de La Felguera se atravesarán poblaciones mineras como Tuilla, Carbayín Altu y Carbayín Baxu, en donde se podrán ver los restos de un pasado reciente de intensa actividad minera. Se podrán contemplar pozos como el Mosquitera o el Candín así el conocido monumento al minero. En esta primera parte del recorrido se atravesará la primera gran obra que supuso el trazado para salvar la subida a Carbayín: el tunel de Curuxona.

Una vez en Valdesoto se recorrerá parte de la senda Ríu Negro  afrontando una importante subida hasta el núcleo de la población. Aquí se podrá realizar una pequeña parada para reponer fuerzas. A partir de aquí se abandonará ligeramente el trazado del ferrocarril, para evitar el tráfico, bordeando El Berrón y pudiendo parar en el parque de los Riegos de Noreña para comer.

Tras la comida, la ruta continuará por Ferrera hasta otra de las grandes obras de ingeniería del trazado: el plano inclinado de San Pedro, que tenía una longitud de 715 metros y una pendiente del 12% y que se construyó para unir las estaciones de San Pedro y La Floría. Actualmente no se puede visitar.

Subiendo las empinadísimas cuestas de Varé se comprenderán mucho mejor las dificultades técnicas y la envergadura de la obra. En ninguna otra obra para el transporte de viajeros en España se utilizó un plano inclinado. Tras una inclinada bajada, la ruta se adentrará en el concejo de Gijón. Se puede parar en Pinzales a reponer fuerzas y así afrontar los últimos 10 kilómetros que quedan de ruta.

La entrada en Gijón se hará por el barrio de Santa Bárbara que conecta con la red de carriles bici de la ciudad; primero por la Avenida de la Constitución y luego por Carlos Marx hasta llegar a la estación de Sanz Crespo.