Descripción de la ruta.

Esta ruta muestra lo cerca que tenemos la montaña y el embalse de Los Alfilorios en particular, y al transcurrir por carreteras con poco tráfico, va a ser una ruta estupenda para desconectar. Eso sí: el ascenso desde la villa de Argame es un tramo de 4 kilómetros de subida constante por lo que es algo duro, pero si se está acostumbrado a andar en bicicleta un poco, no hay problema.

Se sale de la capital carbayona por la senda del Parque de Invierno hacia Fuso de la Reina y por la que antiguamente circulaba el tren hacia Trubia. De camino es posible visitar la antigua estación de tren de La Manjoya que alberga el Aula de Interpretación de la Naturaleza. En este punto, hay que desviarse para subir el alto de El Caleyo. Una vez en el alto, se toma la carretera que lleva, en una pronunciada bajada, a Bueño.

Bueño es un pueblo famoso por tener una alta concentración de de hórreos y paneras de Asturias; medio centenar —ni más ni menos— y algunos de hace más de cien años. El más antiguo, en el centro de la localidad, es del siglo XVI.

Desde Bueño, hay que ir hacia Las Segadas por una carretera tranquila y prácticamente llana, exceptuando los últimos 200 metros donde comienza una rampa de 14% de desnivel (que se puede subir andando). Desde ahí, la ruta se dirige hacia Soto de Ribera, cruzando durante el camino dos ríos. En primer lugar se cruza el río Nalón por el famoso “entrepuentes”, para dar a la N-630, con poco tráfico (aunque como siempre habrá que tomar las debidas precauciones). Y en segundo lugar se cruza el río Caudal, tras lo cual se llega al pueblo de Soto de Ribera, aunque no se entra en el mismo, pues justamente antes de cruzar las vías del tren hay que girar a la izquierda por la carretera MO-5 para proseguir hasta llegar a Argame. En este pueblo es donde comienza la subida, siguiendo la carretera MO-5, de poco más de 4 kilómetros que hay hasta el embalse de Los Alfilorios.

El embalse de Los Alfilorios se construyó para abastecer de agua potable a las poblaciones de la zona central de Asturias, principalmente a Oviedo. Se sitúa en el concejo de Ribera de Arriba, si bien, la casi totalidad del embalse se encuentra en el concejo de Morcín. Hay una pequeña área recreativa con mesas y bancos, e incluso un bar-restaurante cercano, que puede usarse para hacer una parada. Desde este punto es posible admirar las vistas que brinda este paraje y también por el reflejo en las aguas del embalse de las montañas del Monsacro, toda la sierra del Aramo y, más a la izquierda, la Mostayal.

Después de bordear el embalse, se sube un poco más hasta el pueblo de Campo (Peñerudes), donde se puede ver a lo lejos el Torreón de Peñerudes. Su origen es medieval (siglo XII) y se cree que su función era defensiva (sus paredes son de casi dos metros y medio de grosor).

Continúa la ruta hacia el pueblo de La Mortera a través de una fuerte bajada. Pero bajando con cuidado no habrá problema. ¡No hay prisa! No obstante, recomendamos respetar la distancia de seguridad y moderar la velocidad para evitar sustos y caídas tontas.

En el pueblo de La Mortera se puede hacer una parada para coger agua en la fuente y, echando la vista atrás, contemplar el torreón de Peñerudes desde otra perspectiva. Desde este punto la ruta se dirige hasta Lavarejos, donde se llega al cruce con la carretera AS-360, la cual hay que tomar para llegar, tras pasar por los pueblos de Rebollal y La Arquera a Fuso de la Reina.

Desde esta localidad se vuelve a Oviedo por la senda verde (Fuso de la Reina – Oviedo), siendo la capital del Principado el punto final de esta ruta.